Inavitable

Clarea el dia y con el amanecimos bailando...vos, reclamando, locurad y una deuda de amor que yo en silencio me prometi pagar con cuerpo y alma.

Otra vez me llevo el olor de tu piel y tu aliento devorado. Tu carcajada al compas de la mia. Y tu mirada ...que me perfora me inunda y me tiembla el alma entera.

En solo una y despues cientas noches fuimos juglares, magos, musicos, cantantes, asesinos, bailarines, delincuentes y luchadores.

Nos embriagamos de confesiones y complicidades ...de risas muchas risas ruidosas, viscerales, poderosas.

Te ame en carne viva como tantas veces antes...pero esa noche llore largamente un orgasmo a duo .

Nos dormimos de dia en mil dias entrelazados y despertamos a las pocas horas aun ebrios de amor y de brios y al sentir tu cuerpo suave y tibio pegado al mio volvi a llorar silencioso deseando el poder de congelar el tiempo .

Pero el amargo temor y la realidad que nos aleja, nos despabila de un soplido.

Como en un retorno ciclico que pareciera durara por toda la eternidad, tu boca queda ligada a la mia en un beso humedo   infinito y dolorosamente cierto.

Aun siento tus manos apretando fuertemente las mias , ahogando mi cuello , ahogandose el tuyo pegandome por no acariciarme y acariciandome por no pegarme.

A veces no se quien soy cuando me falta esta pasion...me seco...me oscuresco ...me hago invisible aun para mi mismo.

Pero en cuanto encendemos esta hoguera que desde hace tiempo alimentamos...este " ignis fatuus" ..y lo hacemos juntos y jugando , siento que encendemos nuestras almas, alas, utopias y renacimientos.

Como dos fenix danzando en un cielo azul ceruleo en medio de esta roja pasion que es sangre y savia para los dos...siento que estamos tan vivos...

Te amo hace ya unos de 10 años ...hace ya mas de otras vidas

y vos a mi

y asi una y otra vez el gran castigo de Sisifo como si amar apasionadamente fuera delito...el gran mito de la absurdidad humana  hace su aparicion.

Y nos invade la ausencia y el silencio..

Pero de esta absurdidad que es tan nuestra ..ni juntos ni separados podremos escapar nunca jamas.


Es la maldicion de nuestro amor.


Y no lo digo yo...lo escuche anoche entre sueños susurrado por un coro de brujas.

Y como los sueños son puro surrealismo por detras aparecia un pelado alto y flaco desgarbado y bamboleante cantando a los gritos " es tuya Juan agarrala Juan es tuya"...

Una niña despeinada

 Había una vez, una niña.

No siempre en las veces se trata de niñas, pero esta vez sí.
Y esta historia trata de una niña pequeñita, de cabellos lacios y amarillos, de ojos de cielo y pies grandes.
Era de buen comer aunque tenía que seleccionar las comidas.
Un día, no sé bien como ni por qué, esa niña entro en mi casa.
Estaba despeinada recuerdo.
También recuerdo que tenía una sonrisa dorada y con brillos alegres; pero algo tristona a la vez.
Ese instante quedo grabado en mí. Ese momento jamás lo olvidare.
Ahí, viéndola a los ojos, vi que de ellos salían rayos de ternura que se clavaron directo en mi corazón.
Debo confesar que mi corazón en ese entonces estaba muyyyy escondido.
No había forma de que algo le entre. Ni rayos ni nada.
Pero extrañamente sus rayos de ternura abrieron todas las barreras y ciertamente, atravesaron todos los obstáculos y se clavaron impertinentes y certeros.
Al día siguiente cuando me levante, sentí que había algo raro en mi pecho.
Fui a lavarme los dientes, camine a ciegas porque tenía los ojos llenos de lagañas cuando llegue a pararme frente al espejo y seguía sintiendo eso raro.
Tanteando agarre la canilla, la abrí y haciendo cacerolita con mis manos junte agua y metí la cara para sacarme las lagañas pegoteadas.
Estaba fresquita el agua la verdad. Claro, el verano se había ido a reposar y ya estaba entrando el otoño con sus mañanitas bellas y fresquitas.
Y ohh sorpresa….. vi en el espejo rayos dorados, amarillos, rojos, verdes, y de mil colores más clavados en mi pecho.
Levante la vista y mirándome a mí mismo en el espejo me dije, no fue un sueño, si estos rayos están, entonces esa niña debe ser real.
Sorprendido y extrañamente contento me vestí, baje las escaleras, salí al jardín, fui a la cocina, camine al cuarto de los chicos, mire para arriba y para abajo; pero no la encontré.
Me pregunte si habría sido un sueño loco o si realmente había conocido a esa niña.
Decidí creer que había sido un bello sueño y arrancar mi día con esa sensación.
Pasaron horas, días, viajes, trabajos y varias cuestiones.
Un viernes, uno donde el otoño me dio a entender que ya estaba para quedarse un tiempito, en compañía de mis hijos, tramando algún plan de comida y película, un timbre sonó.
Era un 19 de Junio. Faltaban dos días para el cumpleaños de Manuel, habían pasado 23 días del cumple de Santiago y resulta que apareció esa niña de ojos color de cielo, cabellos lacios y amarillos y pies grandes.
Que sorpresa fue !!!, no había sido un sueño.
Los rayos en mi pecho tenían explicación.
En ese día otoñal cumplía años ese bello ángel.
No podía ser que no se celebrara la ocasión.
Las ganas, los ánimos burbujeantes y los rayitos de luz, hicieron que en un santiamén aparecieran sandwichitos, papas fritas, chizitos, gaseosas, y hasta una bella torta.
Alegrías, bailes y soplidos de velas con deseos incorporados pintaron toda la casa.
Y aunque lo lógico era que los regalos tenía que recibirlos ella, yo tuve uno de los más maravillosos de mi vida.
Los rayos de colores, los sueños y las risas se hicieron parte de mí.
Como las flores del Jazmín, con ese delicioso aroma y la blancura de sus pétalos, mi Jazmín, se adueñó de mi corazón.
Siguieron luego, muchos días y estaciones, risas, llantos, juegos, se sumaron hermanos, abuelas, tías, primos. Se fue haciendo muy suavemente una nueva familia.
Pero ese día de otoño que jamás olvidare, una loca cigüeña con pico rayado, alas dobladas al revés y ojos que guiñaban siempre, me trajo como regalo a la más increíble hija que un padre alguna vez pudiera haber deseado.
Por suerte mantiene sus cabellos lacios y amarillos, sus ojos de cielo y sus pies grandes que siempre buscan pisarme.
Ya no es tan pequeñita, pero su magia me sorprende a cada día y su luz sigue iluminándonos a todos..