Acaríciame.
Abrázame.
Dame tus gestos.
Cociname alguna vez
Llora acostada junto a mí.
Escurrí mis lágrimas y mi sudor.
Entrégame las llaves de tu lancha.
Escurrí tu placer por estar conmigo, en el mar que lo diluya y dame solo lo
que voy a buscar.
Un pedacito de paz y de vos.
Y cuando te muerda lo labios no va a haber
idiomas.
Dientes incrustados suavemente en carnes sin
sangre pero sanguineamente bravos.
El instante del placer.
El brote del amor.
El gesto que explica el valor de la carne
sangrando.
Y después del momento, la sorpresa de que no
hay ni un curita que sirva.
Y en los mas luegos, el regreso a uno, el
regreso a uno.
Y volver a recordar los sueños tuyos
Y rituales y Reta y paganas sensaciones.Y volver a recordar los sueños tuyos
Y volver a explicar lo que no se explica.
y volver, y yo y la arena.